Monasterios de San Millán de Yuso y de Suso. Incluidos en la Lista de Patrimonio Mundial en 1997.
En la comunidad autónoma de La Rioja, en el corazón de la Sierra de la Demanda, en un pequeño municipio de apenas doscientos habitantes, San Millán de la Cogolla, se erigen los monasterios de San Millán de Yuso y Suso.
Aquí confluyen una serie de valores artísticos, culturales e históricos que lo hacen único. Sus dos monasterios, el de Suso o «el de arriba» y el de Yuso o «el de abajo», situados en un enclave paisajístico verdaderamente impresionante, integran un conjunto monumental de gran importancia y trascendencia.
Los monasterios de Yuso y Suso en San Millán de la Cogolla no son un grupo de edificios aislados. A partir de ellos se conformó un territorio de administración monástica, que configuró un paisaje cultural que es posible reconocer en el patrimonio tangible e intangible.
La dimensión del lugar, su verdadero valor, va más allá de sus monumentos; se encuentra en la suma de todos los elementos que lo conforman, incluidos sus habitantes, sus fiestas, sus tradiciones, sus lugares de encuentro, los lugares de trabajo; todos ellos elementos necesarios que vertebran el paisaje monástico y su esencia inmaterial.
En este marco surgió el primer ejemplo histórico de la lengua española: el primer pasaje de prosa continua, una muestra de un sistema lingüístico, perfecto en sí mismo, en razón de su utilidad comunicativa, alejado ya de los esquemas latinos, con independencia lingüística consciente. Y en este mismo marco, solo algunos siglos más tarde, escribió sus versos Gonzalo de Berceo, el primer poeta de nombre conocido de nuestra literatura.
Si San Millán constituyó el germen de una sobresaliente vida cultural mediante el acopio, selección y difusión de textos por parte de sus escribas e hicieron que La Rioja tuviera gran vitalismo en este sentido y que fuera en la Edad Media un núcleo creador y difusor de cultura de primer orden, quiere hoy seguir siendo un centro cultural y de visita de valor universal, donde se sigue manteniendo y promoviendo la vida monacal, académica y turística.
En este sentido y de acuerdo con las directrices de la Unesco, en el año 1998 se constituyó la Fundación San Millán de la Cogolla con el objeto de favorecer la protección y cuidado del medio natural de la zona declarada Patrimonio de la Humanidad en San Millán de la Cogolla y los monasterios de Suso y Yuso; investigar, documentar y difundir los orígenes de la lengua española y promover la utilización de las nuevas tecnologías para la difusión y actualización del español en el mundo, así como fomentar el desarrollo social, económico, cultural y turístico de San Millán de la Cogolla y su entorno.
Para el logro de sus fines, la Fundación ha desarrollado a lo largo de estos años proyectos de investigación, conservación y difusión de los valores patrimoniales que configuran el Valor Universal Excepcional del conjunto monástico emilianense reconocido por la Unesco.